Un día en el bosque

Sus, Diamante, Duclack, Mary, Vicrogo y Wen estaban pasando un estupendo día en el bosque. Se habían llevado a Pandy y Tanger para que jugaran juntos libremente en un entorno sano y agradable.

Celebraban el cumpleaños de Vicrogo, así que brindaban a su salud mientras comían dulces y todo tipo de delicias.

Duclack: ¡Por muchos años más!

Wen: ¡Eso! Que podamos seguir celebrando juntos tu cumpleaños durante muchos años.

Sus: Es que te queremos muchísimo, Vicrogo.

Diamante: Eres muy importante para nosotros.

Vicrogo: Muchas gracias, chicos.

Sus: ¿Te gustan los dulces? El pastel de fresas, caramelo y crema está riquísimo. Mary, eres una cocinera maravillosa.

Diamante: Tu si que tendrías que tener un programa de cocina en televisión. Fatumata cocina platos...que no se lo comen ni las cabras...

Sus: No te metas con Fatu, cariño.

Vicrogo: Con amigos como vosotros es imposible estar triste. ¡Brindo por vosotros!

Pandy: #### (Tanger, una vez me perdí por este bosque...)

Tanger: ### (¡Que miedo!)

Pandy: #### (Aunque recuerdo lugares interesantes, vamos)

Tanger: #### (¿No será peligroso?)

Pandy: ### (Confía en mi)

Pandy y Tanger se alejaron hasta desaparecer entre la vegetación...

Sus se levantó preocupada al no verlos por ninguna parte...

Sus: ¡Pandy, Tanger! Que extraño...espero que no se hayan alejado mucho...

Pronto se pusieron a buscarlos pero parecía que se los había tragado la tierra...

Wen: ¡Pandyyy! ¡Taaangeeeer! ¿Dónde estarán?

Duclack subió a lo alto de una colina para tener una vista más amplia de los alrededores...

Duclack: ¡Tangeeer! ¡Paaandyyy!

Sus: ¿Los ves?

Duclack: No... estoy empezando a preocuparme...

Sus: Y yo...

Vicrogo: ¡Veo un rastro! Hay unas huellas y creo que son de ellos.

Mary: ¡Es cierto! Han seguido este camino, ¡vamos! 

De pronto, se encontraron con Diamante que corría en dirección opuesta...

Diamante: ¡Ahhhhhh! ¡Socorroooo!

Efectivamente, Tanger y Pandy habían seguido ese camino y antes de que se se perdieran en lo más profundo y peligroso del bosque, Sinéad los rescató. Los tenía entre sus manos, intentando tranquilizarlos.

Duclack: ¿Quien es?

Sus: ¡Es un vampiro!

Diamante: ¡Ahhhh!

Vicrogo: No temáis, es Sinéad. Es amiga mía y no os hará daño.

Sinéad: ¡Vicrogo! Que agradable sorpresa. Encontré estos dos pobres animalitos perdidos y el corazón se me encogió. No los podía dejar solos. Temía que se perdiesen en lo más profundo del bosque...allí hay cientos de peligros y quien sabe, ¡podrían haber terminado muertos despedazados en mil pedazos! Este bosque esconde grandes peligros y feroces devoradores...

Duclack: ¡Gracias por tu ayuda!

Sus: Sí, eres muy amable.

Vicrogo: Ven con nosotros Sinéad, estamos celebrando mi cumpleaños. Aunque no comas seguro que nos podrías contar alguna experiencia interesante, ¡que se que tienes muchas!

Sinéad: Será un placer ;)