miércoles, 25 de septiembre de 2019

Fiesta en el pantano - Capítulo 05: Amor de verano

Capítulo 05

Amor de verano

PD despertó a Belinda y le pidió que se encargara de los adolescentes. Para evitar futuros traumas los engañó. Les dijo que ella misma los había traído ahí con la ayuda de PD. La bebida que habían ingerido estaba en mal estado y se desmayaron. Todos estaban bien, pero Renzo, Manolete, Jorgito y Flavia preguntaban por el paradero de Junior, Kim, Willy y Emma.

Renzo: ¿Dónde están?
Belinda: Han ido a pedir ayuda, están bien, no os preocupéis. 


Mientras tanto, Willy y los demás seguían huyendo de Balaam. Era una zona rocosa y con precipicios que les dificultaba la huida.

Emma: ¡No puedo más!
Willy: ¡Vamos, Emma! ¡No podemos parar!
Kim: ¡Pienso denunciar a toda esa gente!


Balaam apareció ante ellos, cortando la ruta por la que querían escapar. Estaba interesado especialmente en Kim. Era fundamental para el ritual y si no se daba prisa, se le acabaría el tiempo. Kim gritó de miedo al verlo.

Kim: ¡Ahhhhhhhhhhh! ¡Un monstruo!
Balaam: No podéis huir de mi. Será mejor que os rindáis si no queréis sufrir mi ira.
Junior: ¡Déjanos en paz! Mi padre es PD, dueño de estas tierras.
Balaam: ¿PD? ¿Eres su hijo?
Junior: Sí, soy su hijo. Si no nos dejas en paz, mi padre te dará una paliza.
Balaam: Vaya, el hijo de Payaso Demonio...Si quieres puedes marcharte con tus amigos, pero esta se viene conmigo.
Junior: ¡Ni hablar!
Kim: ¡No dejéis que me lleve!


Azur se interpuso.

Azur: Tú, cara escombro. Será mejor que dejes a esta chica en paz. Soy futbolista y doy muy buenas patadas.
Balaam: Ridícula.


La agarró por los pelos y la lanzó contra el suelo.

Balaam: Clack estúpida. ¡Yo no tengo cara escombro!
Junior: ¡Azur!


Junior se abalanzó sobre Balaam para impedir que hiriese a Azur. En el forcejeo, vio como a Balaam se le desfiguraba el rostro. La imagen era tan aterradora que le era imposible luchar. Balaam lo agarró del cuello y se dispuso a asfixiarlo.

Balaam: Me da igual que seas el hijo de mi primo. ¡Nadie impedirá que termine el ritual!


PD: ¡Deja a mi hijo en paz!

PD llegó justo en ese momento. Balaam soltó a Junior sorprendido.


Balaam: ¡Primo!
PD: ¿Has perdido el juicio? ¡Estabas a punto de matar a mi hijo!
Balaam: Mi ciclo llega a su fin, PD. Necesito sacrificar a esos adolescentes para evitar mi muerte. No pretendía hacer daño a a tu hijo. Deja que me lleve a esa clack y termine el ritual.
PD: Eso no es posible. Siento que tu ciclo haya llegado a su fin, pero esto no está bien.
Balaam: ¡No quiero morir!
PD: Acepta tu destino.
Balaam: Me da igual que seamos familia. Te mataré si te interpones en mi camino.


Comenzaron a luchar. Balaam notaba que el tiempo se le estaba acabando. PD se resistía, intentando esquivar todos sus golpes.


Finalmente, Balaam se rindió. Se apartó a un lado y se dejó caer al suelo. Notaba como su cuerpo se deterioraba. No tardaría en convertirse en polvo. Le dolía todo el cuerpo. El tiempo se había terminado. Ni el ritual lo podría salvar de su destino.

Balaam: ¡Nooooo! ¡Esto es por tu culpa!
PD: No debiste hacer algo así, primo. Podrías haber terminado tus últimos días de una forma mucho más digna.  


Balaam se levantó y se acercó al borde de un precipicio. 

Balaam: ¡Me derrito!
PD: Es el final, Balaam.
Balaam: ¡Nooooo!


Balaam se dejó caer por el precipicio y antes de llegar al suelo, ya se había convertido en polvo. Junior se acercó aterrorizado a su padre.

Junior: ¡Papá! ¿Estás bien?
PD: Sí, hijo. ¿Y tú?
Junior: Estoy bien...¿Quién era ese?


PD: Un familiar del que hacía años que no sabía. Su ciclo había llegado a su fin y lo quería evitar haciendo sacrificios...
Junior: Papá...lo siento. No debí desobedecerte. 
PD: Ya hablaremos de eso más tarde.


PD pidió a los niños que guardasen el secreto, que era mejor que todo aquello quedase entre ellos. Junior, Willy, Azur y Emma obedecieron, pero Kim no. Volvieron con los demás y allí los estaban esperando. Kim fue junto a Renzo y le abrazó. Se sentaron en el suelo y hablaron.

Kim: ¡Renzo, tengo que contarte algo horrible!
Renzo: Lo sé...nos han dado bebidas en mal estado. Suerte de esa monja. Ella nos ayudó.
Kim: ¡No es eso! Me han secuestrado y un monstruo me quería comer.
Renzo: Kim...la bebida te debe haber causado pesadillas.
Kim: No era una pesadilla. Un monstruo decía que yo era el sacrificio mayor pero al final se convirtió en polvo.
Renzo: Ahhh..claro.


Emma: Has sido muy valiente.
Willy: Tú también. ¿Crees que podremos guardar el secreto?
Emma: No lo sé. Tengo ganas de contárselo a Flavia...pero no me creería.
Willy: Yo me muero por contarte todo a Renzo...quiero que sepa la verdad...aunque he prometido guardar el secreto...
Emma: A pesar de todo, he disfrutado mucho estando a tu lado...
Willy: Y yo también...quiero decir a tu lado, no a mi lado....


Azur: Muchas gracias, Junior.
Junior:¿Por?
Azur: Me defendiste cuando ese monstruo me estaba atacando.
Junior: No fue nada...
Azur: Claro que lo es. Eres muy valiente. Sé que nos vamos dentro de nada, pero me gustaría dar un paseo contigo, si te apetece...
Junior: Me apetece mucho.


Charlie: Mira, ahí va el rarito.Junior el gallina.
Dalia: Pasa de él.
Charlie: Se merece un último escarmiento. 


Azur y Junior se sentaron en una zona tranquila a la sombra. La refrescante brisa que les llegaba les revitalizó. Por un momento, olvidaron a Balaam y todo lo ocurrido.

Azur: Me da pena despedirme de ti...
Junior: Y a mi...
Azur: Me gustaría volver a verte, Junior. Quizás alguna vez puedas ir a visitarme.
Junior: Me gustaría mucho.
Azur: No tengo ganas de volver a casa ni de empezar el instituto otra vez...me gustaría detener el tiempo.


Azur se tumbó sobre las piernas de Junior. Este la miraba sorprendido y muy vergonzoso. No sabía cómo ponerse.Deseaba acariciar su pelo y besar sus labios. Había sido capaz de enfrentarse a Balaam, pero era incapaz de besar a Azur.

Azur: A pesar de lo mal que lo he pasado, me alegra haber venido. Te he conocido y este lugar, es una pasada.
Junior: Azur...
Azur: ¿Qué?
Junior: Quiero decirte una cosa...desde el primer momento que te he...
Charlie: ¡Eh, cagueta!


Charlie llamaba Junior enfadado. Tenía muchas ganas de darle su merecido. Dalia empezaba a estar cansada de esta situación.

Dalia:Tío, deja a Junior en paz y vamos a otra parte. No vale la pena, Charlie.
Charlie: ¡Ese cagueta tiene que aprender a respetarme!


Azur: ¡Es ese lunático! Quiere agredirte otra vez...
Junior: Maldita sea, nunca me dejará en paz...
Azur: Eres el click más valiente que conozco. Te has enfrentado a un monstruo y seguro que podrías con ese idiota, pero es mejor que nos vayamos. No le hagas caso, Junior.
Junior: No, ya no puedo más. Se acabó.


Charlie: Ahí viene, dispuesto a recibir una buena paliza.
Dalia: Charlie, tío...
Charlie: De nada servirá que te traigas a tu amiga para que te defienda.
Junior: Vengo para decirte que te perdono.
Charlie: No lo entiendo...
Junior: Te perdono por todas las palizas que me has dado y por los insultos recibidos. Te perdono por las vejaciones a las que me has sometido y todos los malos momentos.
Charlie: ¡Mi importa un pimiento tu perdón! ¡Eres un pringao!
Junior: Tienes razón, soy un pringao. Quizás sea todo lo que dices que soy. Tú sin embargo, eres la caña.
Charlie: ¿Te estás burlando de mi?
Junior:¡Para nada!Mira esa gorra, te queda genial. Ese pelo rubio, tu estilo de ropa...eres el click con el que toda clack soñaría.
Charlie: Pues...
Junior: Y yo soy un pringao, vaya tela. Además, pegas muy bien.
Charlie: Eso ya lo sé.


Junior: No has probado tus propios golpes, yo sí. Das fuerte, se nota que haces deporte.
Charlie: Pues sí, mucho fútbol, baloncesto...
Junior: Eres un crack.
Charlie: Gracias...
Junior: Eres un tío que molas y tienes estilo. Yo voy a mi bola, paso de ir a la moda y no le gusto a las chicas.
Charlie: Bueno, tienes tu estilo también. Esa gorra me mola y sabes dibujar muy bien.
Junior: Gracias. Esto es un inicio, un nuevo comienzo para los dos. Todo lo pasado queda olvidado, pero de aquí para adelante tendré en cuenta cada una de las cosas que pasen entre nosotros. En tus manos queda si nos llevamos bien o se desata otra guerra. Si decides ir a la guerra otra vez, tendré que entrenar para superar esa fuerza tan brutal que tienes.
Charlie: La verdad es que me sorprendo de lo fuerte que soy. Nada, por mi olvidado queda todo. No sabía que eras...guay.
Azur: Junior, ¿nos vamos?
Junior: Sí, vamos. Nos vemos. Hasta luego, Dalia.
Dalia: Hasta luego.


Se alejaron tranquilamente ante la atenta mirada de Charlie y Dalia.

Charlie: Ya no me parece tan pringao. Tiene buen gusto y se da cuenta de lo que molo.
Dalia: Mola. Estaba cansada de tantas persecuciones.
Azur: Junior, ¿cómo has hecho eso? ¡Ha sido una pasada!
Junior:He estudiado un poco de psicología y la he aplicado, nada más. Creo que ya no me volverá a molestar más.
Azur: Pensaba que te pegarías con él.
Junior: Estaba dispuesto a ello. Apretaba los puños mientras hablaba, pues no estaba seguro de que mi estrategia funcionase. Menos mal, no me gusta la violencia y tenía todas las de perder.
Azur: Con cada minuto que paso contigo, me sorprendes más.


Los padres de Junior lo estaban observando escondidos en un árbol. Sonreían orgullosos de su hijo.

Calíope: Ese es mi pequeño.
PD: Nuestro pequeño ya no lo es tanto. Es un pequeño hombrecito. Estoy muy orgulloso de él.
Calíope: Yo también lo estoy. 


PD: ¿Y esa clack? ¿Crees que se gustan?
Calíope: No soy una gran experta en el amor, pero salta a la vista. Nuestro pequeño hombre está enamorado. Su primer amor.
PD: Un amor de verano.


Lejos de allí...

Madison y Peter estaban enterrados bajo tierra a excepción de sus cabezas. PD los había castigado de esa forma. Era un lugar por el que no pasaba nadie...bueno, al menos ningún ser normal. Por allí habitaban seres extraños, algunos malvados, otros buenos. 

Peter: ¡Socorro!
Madison: Hermano Peter, ten fe. Nuestro dios nos salvará. Balaam es todopoderoso, él nos rescatará.
Peter: Yo no estoy tan seguro de ello...
Madison: No pierdas la fe. Yo estoy muy tranquilo. Balaam aparecerá en cualquier momento y nos rescatará. 
Peter: No pudimos terminar el ritual...debe estar muerto.
Madison: Un dios nunca muere, y mucho menos si es verdadero. Reza conmigo, hermano.
Peter: Está bien.

Rezaron oraciones a Balaam, ignorando que tras ellos, un ser carnívoro y muy feroz se aproximaba. Tenía hambre y no renunciaría a semejante manjar. Para ese ser, era un regalo caído del cielo, pues no solía encontrar comida en aquella zona y se pasaba días hambriento.

Madison: ¿Escuchas los pasos? ¡Ya viene a rescatarnos!


FIN

sábado, 21 de septiembre de 2019

Fiesta en el pantano - Capítulo 04: El gran sacrificio

Estaban aterrados. Willy cerró los ojos. Esperaba el impacto de las balas en su cuerpo. No sabía si le dolería o moriría en el acto. Pensó en su madre, la dejaría sola. Pensó en su familia, en sus amigos y en Emma. Ella le apretaba la mano llorando desesperada.  Junior gritaba y Azur se tapaba la cara aterrorizada. De pronto, escucharon una voz que les ordenó que se tiraran al suelo.

Belinda: ¡Niños, al suelo!

Todos obedecieron al comprobar que se trataba de una monja con un rifle en las manos.


Curt: ¿¡Qué narices está haciendo!?
Jason: ¡Son órdenes del hermano Mason!
Belinda: No permitiré que matéis a un solo inocente más.

A continuación disparó. Jason y Curt recibieron varios disparos mortales. Murieron sin dar crédito a lo ocurrido. Los niños lloraban entre aliviados y aterrorizados.


Belinda: No os preocupéis, esos no os volverán a hacer más daño. ¿Estáis bien?
Junior: Creo que sí...
Willy: ¿Quién es usted?
Belinda: Una monja arrepentida.
 Emma: Muchas gracias, hermana...


Se acercaron a los cuerpos inertes de los dos matones.

Willy: ¿Están muertos?
Belinda: Así es. Ahora mismo deben estar a las entradas del infierno, que es justo al lugar donde van clicks como estos.
Azur: Si no llega a ser por usted, estaríamos muertos.
 Junior: ¡Nuestros amigos! Están en peligro, hermana.
Belinda: Los rescataremos. 



A Madison, Timy y Peter les costó, pero pudieron arrastrar a todos los adolescentes a una zona soleada. Seguían inconscientes y ajenos a lo que les estaba ocurriendo. Alrededor de los jóvenes, habían colocado antorchas y presidiendo la zona, un trono dorado. Peter agarraba un libro abierto con una mano y leía en voz alta emocionado.

Peter: ¡Regocijaros, pues nuestro mesías llegará y os alzará hasta las estrellas! ¡Vuestras almas impuras y oscuras serán salvadas! ¡Alzaos y gritad su nombre, pues la salvación será para aquellos que se arrodillen y demuestren su fe y amor por él!

Madison intentaba no llorar. Llevaba mucho tiempo esperando aquel momento.


Peter: ¡Oh, Balaam! ¡Acógenos en tu seno y ten piedad de nuestras almas perdidas e imperfectas!


Timy: Oh, es tan emocionante. ¡Viva, Balaam!
Madison: No interrumpas el ritual, necio.
Timy: Perdón...
Peter: ¡Allelujah!


Belinda: Mirad, ahí están esos pringados.

Belinda y los chicos observaban escondidos la escena.

Junior: ¡¿Qué están haciendo?!
Emma: Tienen a nuestros amigos...¡tenemos que hacer algo!
Willy: Un momento, ¿esa no es Kim?
Emma: ¡¿Que le están haciendo?!


Tenían a Kim con los brazos amarrados alrededor de un tablero. Estaba consciente, pues era imprescindible para el buen funcionamiento del ritual.

Kim: ¡¡Socorro!! ¡Tú, ya me puedes estar soltando! ¡No sabes quién soy yo!
Madison: Sé quién eres. 
Kim: ¿En serio?
Madison: Sí, eres el sacrificio para nuestro dios.
Kim: ¿Sacrificio? Es broma, ¿no? ¡No tiene gracia!
Madison: La clack más bella debe ser el sacrificio principal. 
Kim: ¡¡Socorro!! ¡¡Mamá!! 


Junior: Pobre, es el sacrificio principal.
Emma: ¡Tenemos que ayudarla!
Belinda: Ahora es buen momento. Id con sigilo hasta ella y la liberáis. Yo los distraeré.

Salieron tras el árbol y fueron caminando hasta Kim. Intentaban no hacer ruido para no ser descubiertos.


Willy: Intentad ser sigilosos.
Azur: Espero que no nos pillen...yo no quiero ser sacrificio para ningún dios raro...
Junior: Si vamos con cuidado no nos ocurrirá nada malo.
Emma: Pobre Kim, mirad lo mal que lo está pasando...


Kim: ¡Chicos!
Junior: ¡Shhhh!

Junior le pidió que guardase silencio. Comenzaron a desatarla lo más rápido posible. 

Kim: Rápido, por favor...
Willy: Ya casi está.


Cuando estuvo liberada, se abrazó a Willy como una lapa. 

Kim: Ay, muchas gracias ,Willy. 

Willy casi no podía ni respirar.

Azur: De nada...
Junior: Debemos irnos cuanto antes.
Emma: ¿Y los demás?
Kim: Ya buscaremos ayuda...
Emma: Confiemos en Belinda.
Kim: ¿Quién es Belinda?
Junior: Es una larga historia. ¡Vamos!


Belinda apareció ante los lunáticos de la secta. Llevaba con ella el rifle, preparada para disparar si era necesario.

Peter: Hermana Belinda. ¿Vuelves con nosotros? ¿Te arrepientes de tu actitud blasfema?
Timy: ¡Di que sí, hermana!
Belinda: Me he cargado a Jason y Curt con este rifle. ¿Eso contesta a vuestra pregunta?
Madison: ¡Has asesinado a dos discípulos de Balaam! ¡Arderás en el fuego eterno!
Peter: Has perdido la cabeza.


Belinda apuntó a Madison con el rifle.

Belinda: Estoy más cuerda que nunca, Madison. Debería haber intervenido mucho antes, habría salvado la vida muchos inocentes.
Madison: Arrepiéntete, hermana. Balaam es misericordioso y perdonará tus pecados.
Belinda: Me importa un cuerno que esa cosa me perdone. Es más, espero mandarlo al infierno de un solo disparo.


Balaam apareció tras ella y le arrebató el rifle. Era un ser repugnante. Su rostro era cadavérico, con ojos saltones inyectados en sangre y dientes sangrientos. Se le veían las costillas y sus brazos eran verdes. Sus manos tenían garras con unas pezuñas afiladas y poderosas. Su pelo negro y pringoso relucía bajo los rayos del sol.

Balaam: Veo que te has convertido en una blasfema, enemiga de la verdad y la salvación.
Belinda: De tu boca solo salen culebras y gusanos. Tus palabras no tienen efecto sobre mi, bestia inmunda.
Balaam: Formarás parte del sacrificio, hermana Belinda. 


La golpeó y perdió el conocimiento. Seguidamente la lanzó junto a los adolescentes que yacían en el suelo.

Timy: Señor, quizás podamos hacerle entrar en razón...
Balaam: Me da igual, está condenada. A mi nadie me habla así, soy el dios todopoderoso.
Madison: Es que...
Balaam: ¿Me estás cuestionando?
Madison: No, eso jamás.


Balaam se sentó en el trono de oro y miró a todos los adolescentes inconscientes.

Balaam: Es perfecto. Gracias a esto, podré salvar mi vida.
Peter: ¿Está todo correcto, señor?
Balaam: Sí, ¿dónde está la joven más bella?
Madson: ¡No está!


Balaam: ¿¡Qué parte del ritual no habéis entendido!? ¡Sois unos estúpidos! ¡¡El tiempo corre en mi contra!!


Timy: ¡Lo hemos hecho todo bien!
Madison: ¡Mirad, por ahí va! ¡Se escapa junto a esos mocosos!
Balaam: ¡Grrrrrrrr!


Balaam estaba muy furioso. Se abalanzó sobre Timy y lo agarró del cuello.

Timy: ¡Señor! ¡Me hace daño!
Balaam: ¡He confiado en vosotros y me habéis decepcionado! Mereces la muerte.
Peter: Por favor, señor, perdónele la vida.
Balaam: Está decidido.


Le partió el cuello y Timy murió en el acto. Seguidamente, salió tras Kim y los demás.

Madison: ¡Hermano Timy!
Peter: Balaam es sabio, hermano.  Debemos acatar sus decisiones. 
Madison: Tienes razón, hermano. Lo siento, Timy. Tu sacrificio ha servido para calmar la ira de nuestro dios. Puedes marcharte de este mundo feliz y en paz.


PD: ¡Eh, vosotros!

Payaso Demonio estaba buscando a su hijo. Encontró una publicidad de la fiesta y en seguida se preocupó. Siguió el rastro hasta dar con ellos.

PD: ¿Dónde está mi hijo?


Peter: ¡Lárguese de aquí o sufrirá la ira de nuestro dios!

PD agarró del cuello a Peter y miró amenazante a Madison, que se mantuvo a una distancia prudencial.

PD: Creo que sé de quién hablas. Mi primo, el payaso Balaam. ¿Ese es vuestro dios?
Peter: ¿Payaso? ¿Su primo?
PD: Sí, es un payaso demonio. No es ningún Dios. Los payasos demonios tenemos un ciclo de vida, como los humanos. Vivimos 400 años, pero como todo, tenemos un final. Existe una forma de detener ese proceso y alargar nuestra existencia por muchos años más. Esa forma es el sacrificio de sangre joven en un ritual impuro. Solamente un payaso con el corazón oscuro es capaz de cometer semejante atrocidad. Asesinar a tantos inocentes por continuar viviendo. Es incapaz de aceptar su destino y agradecer el tiempo vivido. 
Peter: ¡Eso es falso!
PD: Habéis asesinado a clicks inocentes...y querías matar a todos estos niños.
Madison: ¡Es necesario!
PD: Este es mi territorio y seréis sometidos a una condena por vuestros crímenes. Ahora hablad, ¡por dónde han ido!


Continuará...